Actualmente existen algunos sistemas de toldos que son más demandados que otros para ofrecer protección frente al sol. Y es que, la gran variedad de opciones que existe en el mercado puede generar dudas para los compradores. Los toldos para balcones se pueden clasificar en enrollables a manivela, motor eléctrico y cortina corredera.
Toldo tipo estor
Es un toldo vertical enrollable y su precio y características lo convierten en una elección habitual de los clientes.
El sistema vertical consta de unos soportes de aluminio que pueden fijarse en paredes y son los que proporcionan el soporte rígido al toldo. Este tipo de toldos verticales ofrece diferentes posiciones con las que colocarlo de una manera u otra en función de la intensidad del sol. En definitiva, es una estructura que se puede fabricar con cualquier material y ser mezclado con telas, lonas, etc.
Brazo Invisible
También se conocen como toldos extensibles, y si se pretende proteger el balcón del sol serán una elección perfecta. También se puede añadir un cajón de aluminio y transformar el toldo al sistema ‘semicofre’.
Está fabricado en aluminio y se puede instalar en techo y paredes. Por su facilidad de acople puede integrarse como parte del mobiliario o de la decoración del balcón. También se pueden añadir motores que automatizarán el toldo. Cabe destacar que la inclinación del mismo será la que se elija en el momento de su instalación.
Punto recto
Finalmente, si se posee un balcón con paredes laterales, el toldo punto recto es una elección idónea. Se podrá motorizar e incorporar un cajón. En función de la longitud de los brazos puede alcanzar los 170º que permiten cubrir la totalidad del balcón. De esta manera, se obtiene una intimidad total del hogar. Fabricado en aluminio con telas podrá alcanzar la inclinación que se desee.